05 mayo 2011

II Jornada Literaria - 1 de abril - OCTAVO RELATO

El ejercicio de improvisación literario titulado "PRODUCCIÓN EN CADENA" consistió en crear 18 textos colectivos. Cada participante disponía de dos minutos para continuar el relato. Disfrutad de estos cadáveres exquisitos, de los cuales aquí colgamos el OCTAVO: 

Cuaderno literario de María
Conato de alegría

Parecía amagar una sonrisa, una zancada hacia algún lugar cómodo; casi como llegar a casa, pero eso desapareció en un segundo, seguidamente se puso seria y a correr entre la gente. Decidió no contar los pasos, pero sí alejarse rápido de aquella multitud. Aquella multitud le aturdía, y necesitaba un momento para sí mismo, en el que no tuviera que dar explicaciones, solo él. Solo con sus revistas. Su padre era un asiduo lector de LIB y PENTHOUSE. Esa colección, aún incompleta le había caído en herencia. Aunque parezca extraño las chicas desnudas de las revistas le recordaban mejores momentos de su infancia en compañía de su padre. Esas chicas le traían el aroma de un padre que, si bien no fue un buen hombre, tampoco podía decirse con rigor que fue malvado. Su padre nunca fue violento. Su padre no, pero ¡su abuelo! Metía unas hostias de dejarte tres días descolocado y sin ver todavía una salida a este callejón en que me encontraba. Total, ¿para qué? Si ella ya se había marchado, no me quedaba más remedio. Así que se dio la vuelta y se puso en camino hacia su casa. Por fin llegaré a casa. Llevo esperando este momento todo el día. Como en casa en ningún sitio. Y por fin, tras muchas horas, llegó a casa. Tanto caminar y estaba otra vez como al principio, algo había que hacer, pero... ¿qué? Me dije: «piensa». Pero mi cabeza estaba bloqueada. No conseguía pensar en nada. Entonces recurrí a mi instinto. Nunca me ha fallado. Pero en esta ocasión no conseguía nada. Solo un blanco en mi mente. No venía ni una palabra, excepto la palabra fin. Terminar o... continuar. La laguna en mi mente, the end, y luego, ¿qué? Luego nada, como siempre, un café, cuatro de azúcar y la sensación del trabajo hecho.

No hay comentarios:

Publicar un comentario