El ejercicio de improvisación literario titulado "PRODUCCIÓN EN CADENA" consistió en crear 18 textos colectivos. Cada participante disponía de dos minutos para continuar el relato. Disfrutad de estos cadáveres exquisitos, de los cuales aquí colgamos el DECIMOSÉPTIMO:
Cuaderno literario de Gil Gamés
La fecundidad de los paquidermos
Es sabido que la tasa de fecundidad de los elefantes es la tercera parte del índice de natalidad humano en los años posteriores a una guerra. También es de conocimiento general que los animales no piensan. Eso creía yo hasta el día en el que viajé por primera vez al pueblo de mi abuela, me llamó la atencón el color de las cosas y el sentimiento de soledad que se desparrama de aquel lugar apacible, perdido en el sur profundo. Me habían contado muchas anécdotas sobre aquel lugar, de las cuales me creía la mitad. En el fondo nadia podía ser tan horrible. Así que decidió no creer nada y comprobar las cosas por sí mismo. Siempre he creído en la experiencia, pero en este caso me parece que no nos va a ser muy útil, igual es mejor dejerse arrastrar por las circunstancias al fin y al cabo cada cual es él y sus circunstancias. Pero si me dejo llevar es posible que muera cuando yo quiera y no cuando los demás quieran. Porque morir debería de ser un acto voluntario, auténtico, sencillo, un derecho de un vivo que ladra el vaho del cementerio, que responde a su llamada. Morir, no cuando la muerte venga si no cuando la llame. Inesperada muerte yo no te quiero, y así la entiendo. Inerte, inanimada, carente de latidos. Ausente de vida. ¡qué despropósito! Pero en el segundo después se encuentra en un lugar totalmente desconocido, donde habitan los duendes verdes que tienen barba y ojos chispeantes que miran con recelo.
Para que así sea.
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